El cuarto proyecto consiste en una “urna” donde se ubicará un maniquí con un traje a tamaño real del “Caballero Oscuro”, la versión de Batman de la trilogía cinematográfica de Cristopher Nolan. El traje se confeccionó como incursión cosplay en el año 2019, y estaba ocupando sitio en un armario de la casa. Digamos que la operación “salir del armario” de Batman era una necesidad física.
La fase 1 consiste en crear la urna que proteja el traje del entorno agresivo del taller y que sea parte del efecto. La fase 2 consiste en crear un espectáculo de luz y sonido basado en Arduino y una tira Neopixel de 360 leds y focos DMX. La fase 3 tratará de implementar un modelo animatrónico donde al menos se muevan los pinchos del guantelete, los ojos y la boca, y probablemente un brazo.
El modelo mental que perseguimos en la “urna” se basa en el soporte del traje que aparece en la segunda película del Caballero Oscuro, básicamente una estructura de hormigón. Lógicamente tendremos que usar plástico transparente para que sea una urna protectora y no podremos usar hormigón real como base de la estructura, pero esta imagen sirve de inspiración:

Mi hijo quiere que el proyecto se quede en la fase 1, ya que esto significa que yo soy Bruce Wayne, y tengo el traje disponible en la Batcueva. No es malo el concepto. En el momento que le ponga animación de luces y sonido en la fase2, pasará a ser un muñeco animado, no un traje de batman. Es curioso que ese “problema” ya lo identifiqué en su momento, pero es algo que poca gente percibiría. Mi hijo tiene “olfato”. Yo creo que la fase 2 va a ser espectacular, por lo que hay que ir a por ella. Después se alegrará.